Neymar dejó la concentración tras la decisión de no apelar la sanción.

“Espere con mucha fe y esperanza la posibilidad de todavía jugar para la selección brasileña pero infelizmente no será posible. Nunca esquivé la responsabilidad que tengo como uno de los líderes y capitán del grupo y éste es momento de tomar una decisión”, suscribió.
Neymar consideró en su mensaje que permanecer entrenando sin chances de jugar no sería "positivo" para él ni para el plantel.
“Pido perdón a mis compañeros por haber llegado a esta situación pero estoy seguro que salgo con un nuevo aprendizaje para mi carrera. Buena suerte Brasil”, cerró.
En las horas posteriores al último partido correspondiente al grupo C, la Comisión Técnica de la CBF decidió no apelar la sanción y liberó al futbolista que recibió cuatro fechas por la expulsión en el duelo ante Colombia agravada por un pelotazo a Pablo Armero, un cabezazo a Jeison Murillo e insultos al árbitro chileno Enrique Osses en el túnel hacia los vestuarios.
“La Comisión Técnica y el jugador esperan que el mismo rigor con el que Conmebol suspendió a Neymar sea adoptado en todas las competiciones organizadas por la entidad”, se quejó CBF a través del comunicado.
"También lamenta la pérdida de un jugador importante para la disputa de esta competición”, agregó.